El primer gol de los Tigres en esta final llegó de manera controvertida. El árbitro sancionó con un penalti un aparente desplazamiento de Javier Cortés sobre el brasileño Rafael Sobis.
Gignac no tuvo piedad en su ejecución desde el manchón de los once metros, y con un potente disparo colocó la pelota arriba y a la derecha del arco de los Pumas. El 1-0 cayó al minuto 14.
A los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México les faltó capacidad de reacción ante el agobio causado por la gran capacidad ofensiva de los Tigres.
El 3-0 llegó al 59'. Gignac sacó un disparo de derecha dentro del área de Pumas, el arquero Palacios rechazó la pelota y Sobis estuvo atento para aprovechar el rebote y rematar la jugada a bocajarro.
Con esta amplia ventaja, los Tigres quedaron muy cerca de conseguir el cuarto título de liga de su historia.
El partido de vuelta de esta final se jugará el domingo por la noche en el estadio Olímpico Universitario de la Ciudad de México.
Los Pumas están a obligados a anotar tres goles sin recibir ninguno para coronarse por octava vez en su historia.
En caso de que haya empate en el marcador global después de 180 minutos, se jugaría el tiempo extra y, de ser necesario, se tirarán tandas de penaltis.