Valencia golea 3-0 al Málaga y recupera su imagen en la Liga de España

El equipo de Nuno mostró una cierta mejoría y encontró un respiro gracias a los goles de Pablo Piatti (19’), André Gomes (33’) y Dani Parejo (88’).

El partido se presentaba con algunas urgencias para los valencianistas, pero los goles iniciales tranquilizaron al equipo que, sin brillar en todo el partido, ofreció su mejor imagen en Mestalla desde el comienzo de la Liga. 

El conjunto de Javi Gracia no hizo un buen partido y, además, las circunstancias le fueron adversas. Charles contribuyó en la jugada del primer gol, Angeleri se lesionó y Duda falló el penalti.

Los ‘blanquinegres' controlaron el juego durante la primera mitad, en la que manejó el balón con más criterio que en anteriores encuentros y no permitió que el Málaga se aproximara con peligro a su portería.

A pesar de ello, su mayor protagonismo no estuvo acompañado de demasiadas ocasiones de gol, pero sí del aprovechamiento de las que dispuso.

La primera fue en una falta lanzada por el argentino Piatti que tocó ligeramente Charles y acabó en el fondo de la meta de Kameni. La segunda una acción individual de Gomes, que acabó con un potente remate que Kameni no pudo detener.

Los goles reflejaban la superioridad local y la falta de fortuna del Málaga que sufrió la lesión de Angeleri justo antes del 2-0 y que desperdició un penalti en el tramo final del primer periodo (m. 38).

El árbitro consideró que Santos hizo manos y en el lanzamiento Duda no fue capaz de engañar tras una "paradinha" a Jaume Doménech, quien rechazó el balón.

La primera mitad, entretenida por los lances del juego, acabó con el partido encarrilado por el ‘che' y con la necesidad de reaccionar por parte del equipo andaluz, que no había creado peligro ante la meta local a pesar de manejar en algunos momentos el balón con bastante criterio.

La entrada de Cop tras el descanso dio más intensidad al juego de los malaguistas mientras que el Valencia salió centrado en controlar el partido y aprovechar alguna contra.

Esa fase de juego fue corta y a medida que pasaban los minutos el encuentro se tornó tedioso con la sensación de que al Málaga le faltaban argumentos para acortar diferencias en el marcador y el Valencia no se mostraba lo suficientemente ofensivo como para ampliar su ventaja.

 

 

 

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