PSG parece no levanta cabeza. A pesar de tener importantes individuales, la superioridad no se ve en cancha y las críticas no se han hecho esperar. Para fortuna del club, el gol de Neymar apaciguó un poco los ánimos.
Cuando transcurría el minuto 65, el brasileño ingresó al área y lo derribaron. El árbitro no dudó un segundo en sancionar penal y 'Ney' tampoco dudó en tomar el balón y asumir la responsabilidad para anotar el 1-1 parcial.