La propiedad de derechos económicos de los jugadores por parte de terceros (TPO) está prohibida por la FIFA desde el 1 de mayo de 2015.
Tanto el Sevilla español como el Santos brasileño han sido sancionados con multas de 55.000 francos suizos (56.400 dólares) y 75.000 francos suizos (76.960 dólares), respectivamente.
La prohibición de la influencia de terceros entró en vigor el 1 de enero de 2008. El artículo 18bis del reglamento del estatuto de los jugadores fue modificado el 1 de mayo de 2015 y prohibía también la propiedad de terceros.