Si alguien genera sentimientoS encontrados entre la hinchada de Junior de Barranquilla es Edison Toloza: sí, es una bala, pero sus disparos suelen fallar en la puntería; sí, es un jugador importante, pero la afición no olvida sus fotos de noche de parranda ni que dejó plantado al equipo para buscar fortuna en el exterior y luego, como eso no salió, regresó.
Tal vez por eso la celebración tras un impresionante zapatazo del nariñense al minuto 45 que terminó en gol: él lo gritó con el alma, sus compañeros lo buscaron para abrazarlo y los hinchas tiburones presentes en el estadio de Techo lo cantaron y le dieron en aplauzos lo que minutos antes le habían dado en críticas y rechiflas.
Es bien interesante lo que hizo Vladimir Hernández, quien jugó en la posición habitual del esta vez ausente Michael Ortega, y el trabajo de Guillermo celis, si bien a veces sobrerevolucionado, es fundamental en el medio campo.
Equidad, por su parte, sigue sufriendo en Techo y no ha logrado hacer una buena campaña como local. Sin embargo, a pesar de la derrota, el equipo de Néstor Otero se mantiene en el bloque de los ocho gracias, precisamente, a su buena campaña como visitante.
Junior, que llegó a 24 puntos, quedó muy cerca de la clasificación a la liguilla final del fútbol colombiano.