"La situación es la que es, a ellos les faltan algunos dedos de la mano y a nosotros las dos manos. Es una situación difícil, pero hemos convivido con ella durante dos o tres semanas, incluso diría que durante los últimos dos años. Es cuestión de adaptarse", defendió el técnico español.
En la rueda de prensa previa al encuentro de este miércoles en el estadio Do Dragao, correspondiente a los cuartos de final de la Liga de Campeones, Guardiola se mostró resignado por la larga lista de lesionados con las que debe afrontar el duelo, en el que no participarán por este motivo Ribery, Robben, Javi Martínez, David Alaba, Bastian Schweinsteiger y Benatia.
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"Estamos aquí con los jugadores que están disponibles para conseguir el mejor resultado posible (...) Los que están pueden jugar, los que se quedaron en Múnich no", zanjó.
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El entrenador catalán recalcó que su rival de cuartos es "un grande, un histórico que lleva veinte años habituado a ganar" títulos en Portugal y destacó el nivel de juego exhibido en esta edición por el Porto.
De hecho, recordó que los ‘dragone’ son el único conjunto imbatido por el momento en esta Champions y felicitó a su compatriota -y antiguo compañero de equipo en el Barcelona durante su época como jugador- Julen Lopetegui por ello.
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Sobre el estilo de juego del equipo luso Guardiola resaltó su intención de jugar siempre desde atrás, la capacidad de desborde por los costados con Brahimi y Quaresma, apoyados por los laterales brasileños Danilo y Álex Sandro, así como "el buen juego por dentro" de Casemiro, Héctor Herrera, Óliver y Juan Quintero.
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El emblema portugués afrontará el encuentro también con algunas bajas relevantes, como la de Tello por lesión y Marcano por sanción, a los que se sumará previsiblemente el delantero colombiano Jackson Martínez, quien tampoco entrenó este martes con el resto de sus compañeros por los problemas físicos que lo han dejado fuera de los terrenos de juego durante las últimas semanas.