El presidente del Bayern, Karl-Heinz Rummenigge, informó de que el jugador había mantenido una conversación con el técnico, Jupp Heynckes, en la que "admitió" haber escrito ese mensaje.
El club ha aceptado las disculpas del jugador, por lo que, según Rummenigge, el asunto ha quedado en una "tarjeta amarilla". Rummenigge añadió que, pese al rifirrafe por el mensaje en Twitter, el club mantiene todo su apoyo al jugador sospechoso de haber provocado el incendio que destruyó su casa, en noviembre.
También afirmó que no se había adoptado ninguna decisión acerca del futuro del jugador, cuyo contrato con el Bayern expira a final de temporada.
El jugador brasileño llegó al Bayern cuatro temporadas atrás pero este año no ha disputado ningún partido oficial y además arrastra una larga lesión de rodilla.
Breno fue incluido en la concentración del equipo en Catar, aunque no jugó en los partidos de pretemporada lo que al parecer provocó sus críticas a través de Twitter.
A las dudas sobre su rendimiento deportivo se sumaron el pasado noviembre las acusaciones de presunta piromanía.
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Breno fue detenido bajo sospecha de haber provocado el incendio de su casa, un chalé alquilado en el extrarradio de Múnich e ingresó en prisión preventiva.
El Bayern Múnich intercedió entonces hasta lograr que saliera de la cárcel, pero las investigaciones sobre el suceso siguen su curso.
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