El Manchester City, que afrontó el compromiso ante el Burnley, que inició la sesión en la penúltima plaza, con nueve victorias consecutivas, siete en la Premier, ganaba a la media hora por 2-0, con los tantos de David Silva y del brasileño Fernandinho.
En ese momento los ‘citizens' estaban a un punto del Chelsea, que ya había finalizado su compromiso contra el Southampton (1-1). De forma incomprensible, el equipo de Pellegrini 'desapareció' del partido.
No tuvo capacidad de reacción el Manchester City ante la desesperación del público del Ethiad, que comprobó cómo su equipo dejó escapar una ocasión única de amenazar el liderato del Chelsea.