Manchester United no brilló en Norwich, donde sólo un gol de Danny Welbeck, que entró en el descanso en sustitución del veterano Ryan Giggs, le evitó más complicaciones al técnico David Moyes.
Sexto con los mismos puntos que el Everton y uno menos que el Liverpool, la victoria devuelve al United a la lucha por esa cuarta plaza que mitiga algo su depresión, en una campaña en la que se ha descolgado demasiado pronto de la lucha por el título.