"Lo digo por última vez: No quiero irme de Milán. En este momento prefiero quedarme callado porque no quiero ser malinterpretado", dijo a la prensa el habilidoso brasileño.
"A los millones de aficionados 'rossoneri' (del Milán) les digo que ya tomé mi decisión. Dije que quiero quedarme. Ahora por favor, déjenme en paz", agregó.
Kaká estuvo a punto de ser fichado por el Manchester City en enero por una cifra récord de más de 100 millones de euros (142 millones de dólares).