El nuevo jugador del Barcelona ya ha dejado en evidencia su tranquilidad y humildad en sus primeros días en el club español. Desde ya, ha mostrado ser respetuoso y centrado, algo que le va ayudar en su adaptación.
Tengo que decir que como futbolero y como colombiano me ha emocionado la transferencia de Yerry Mina de Palmeiras al Barcelona, de España.
Y no solamente por el hecho de ser el primer futbolista nacido en estas tierras que vestirá la camiseta del famoso e histórico equipo español, sino también por el ejemplo y mensaje que tiene el tema Mina para toda Colombia.
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El defensor nacido en Guachené es un espejo de superación, lucha, sacrificio, tesón, disciplina y mentalidad en su máxima expresión.
Decir que Mina es elegante para salir con el balón, que es rápido, que tiene buen juego aéreo defensivo y ofensivo y que es ficha puesta en la Selección Colombia para el Mundial de Rusia 2018 es trillado.
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Pero más allá de las cualidades profesionales que lo tienen hoy viviendo un sueño en Barcelona, son para destacar sus valores, de respeto y educación promovidos desde su hogar, en tiempos en los que los muchachos de urbanidad más bien poco.
Viendo uno de los videos publicados en la página oficial del Barcelona me impresionó Yerry respondiendo con un “sí señor” a todas las estrellas que lo saludaron y también a su técnico Ernesto Valverde.
Al astro Lionel Messi, al uruguayo Luis Suárez, al propio Valverde y a Jordi Alba, entre otros; Mina les contestó con calidez y mostrando que más allá de ser un gran zaguero central, también tiene cultura y especialmente humildad, que sabe a dónde llegó, de donde viene y que su personalidad aún conserva las enseñanzas que le inculcaron desde niño José Ulises y Marianela, sus padres.
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Ojalá al exjugador de Pasto y Santa Fe no se le olvide que que es más fácil llegar a la cúspide siendo buena persona y mejor profesional y no posando de presumido y cargado de orgullo.
Por todos los equipos por los que ha pasado, el caucano ha dejado huella por su juego y también por su arrolladora personalidad. Ese es el camino a seguir.
La tranquilidad y hasta inocencia de Yerry Mina nos alegra los primeros días de enero de 2018 y solamente hago votos para que él pueda adaptarse a la disciplina del Barcelona y triunfar como ya lo hizo en un grande de Brasil como lo es Palmeiras.