Sobre los 55 minutos del compromiso entre Inter y Nápoles, Víctor Osimhen y Milan Skriniar tuvieron un duro choque de cabezas, cuando saltaron para disputar una pelota aérea.
El resultado fue un ojo inflamado para el jugador de los napolitanos, quien tuvo que abandonar el terreno de juego porque ni siquiera podía por culpa del hematoma.
Sin uno de sus hombres importantes en el frente de ataque, Luciano Spalletti tuvo que continuar el partido.
Así quedó Víctor Osimhen: