"El comienzo fue incluso bueno, tuvimos varias oportunidades, pero no hicimos goles suficientes", se lamentó Van Marwijk, quien explicó que los problemas empezaron "con dudas en la defensa".
Justificó su ofensivo esquema -jugó con cinco jugadores de ataque- por tener que vencer con dos tantos de margen: "Sabíamos que había que ganar con dos goles de diferencia, fue una frustración. No fue bien de ninguna manera y es mi responsabilidad", comentó.
Van Marwijk recordó que la actual selección holandesa se trata casi del mismo conjunto que se proclamó subcampeón del mundo en el 2010 e incluso ligeramente renovado con la incorporación de jóvenes.