El jugador de 33 años permaneció seis minutos inconsciente tras chocar con el guardameta en el interior del área, según explicaron los servicios médicos que le atendieron sobre el césped del Stamford Bridge.
"Estaba muy asustado. No podía recordar nada desde que el Norwich había marcado el gol del empate hasta que me encontré siendo trasladado al hospital. No sabía qué estaba pasando", relató el futbolista.
El artillero del Chelsea había sufrido otras lesiones a lo largo de su carrera, pero nada le había "asustado tanto" como este incidente, que le provocó una conmoción cerebral y una perforación en el tímpano.
"Me sentía mareado. No podía soportar ningún sonido, había demasiado ruido dentro de mi cabeza", recuerda Drogba sobre sus primeros momentos en el hospital al que fue trasladado.
El futbolista dijo que hasta que vio las imágenes de televisión sobre su caída a plomo fue cuando entendió por qué su familia y amigos estaban "tan preocupados".
"Es algo que no ves todos los fines de semana", señaló el marfileño, para añadir que agradece que sus tres hijos "no estuvieran en el campo aquella tarde".
El guardameta del Norwich llamó a Drogba para disculparse por lo sucedido, aunque el delantero no culpa al portero por lo que considera un "lance del juego".
"Hablé con él y sé que estaba muy afligido por lo que pasó, pero le dije que es algo que puede ocurrir en el fútbol, que no se preocupara porque me encontraba bien", afirmó el marfileño.
La conmoción cerebral del delantero devolvió a los aficionados del Chelsea la memoria del golpe que sufrió el portero Petr Cech hace cinco años ante el Reading, que le obligó a utilizar una protección durante varias temporadas.
Casi un mes después del incidente en Stamford Bridge, Drogba ya está recuperado y a las órdenes del técnico André Villas-Boas para reaparecer esta tarde ante el Swansea.