A pesar de personalizar en el argentino, y de recalcar que no quiere quejarse de los arbitrajes, el D.T del Barça quiso aclarar que esta percepción también la tiene con otros jugadores talentosos.
En el caso de Messi, el entrenador del Barça recuerda que últimamente "bola que toca, bola que va al suelo" y que los árbitros "no intervienen en este sentido".
"Los árbitros saben cómo se tienen que hacer las cosas. Sólo digo que cuando hay reiteración de faltas en las que pueden hacer daño, hay que proteger a los jugadores, no sólo a los del Barça, sino a los de todos los equipos", insistió el técnico azulgrana.
En cuanto a la situación del equipo, que lleva cinco partidos sin ganar y que ha visto reducida su ventaja en la Liga a cuatro puntos, a Guardiola no le molesta que se esté dudando sobre su capacidad.
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"No sé si se duda del equipo. Yo no sé qué piensan todos los aficionados", dijo el entrenador, quien exhibió una sonrisa al asegurar: "Que se hable de crisis está bien".
"No puedo garantizar ganar 5-0 todos los partidos. Soy un buen entrenador, pero no tan bueno", ironizó.
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El técnico del Barça insistió que él y sus futbolistas pueden prometer "esfuerzo y dedicación", y ha recordó que en una de las tres competiciones, la Copa, ya consiguieron el objetivo de estar en la final.
En la Liga Española, Guardiola es consciente de que ha llegado la hora de la verdad. "De aquí hasta el final, ya no hay tregua. Hay muchos partidos y después de cada uno, no hay tiempo para nada. Nuestra intención es recuperar un juego mejor al mostrado en los últimos partidos", recalcó.
Sant Joan Despí (España)