Con camisetas y distintos elementos alusivos al club 'embajador', los seguidores colombianos quisieron rendir un homenaje a la 'Saeta Rubia' en el Palco de Honor del Bernabéu como muestra de agradecimiento a los años en que Di Stéfano jugó allí (de 1949 a 1953).
Algunos de ellos, bastante jóvenes, nunca vieron jugar a Di Stéfano en su equipo, sin embargo, afirmaron que el sentimiento de respeto y admiración hacia "Don Alfredo" les fue inculcado desde pequeños, cuando sus abuelos narraban la forma "magnífica en que Di Stéfano se movía por el campo y jugaba al fútbol".
"Dicen que jamás vieron nada así, que ni siquiera se comparaba con Maradona o con Pelé", cuenta uno de los seguidores azules al hablar sobre las historias de antaño de los hinchas más mayores del 'Ballet Azul'.
A su vez, miembros de un grupo de hinchas del Millonarios residente en Madrid, conocido como Europa Albiazul, se presentaron en las inmediaciones del estadio madrileño para ver de cerca el féretro donde reposan los restos mortales de 'la Saeta' y admirar de cerca las cinco Copas de Europa y demás trofeos y reconocimientos preciados del exjugador.
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El propio equipo colombiano envió, como gesto de hermandad y despedida para con Alfredo Di Stéfano y el Real Madrid, una corona de flores con la leyenda "Millonarios Fútbol Club Colombia" para recordar así la unión histórica entre ambos clubes gracias a la fallecida 'Saeta Rubia'.
A su vez, personas de países como Venezuela, México y Puerto Rico se acercaron al Santiago Bernabéu para darle un 'último adiós' al exjugador de River Plate, Huracán, Millonarios, Real madrid y Espanyol.
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Claudio Giovannucci, oriundo de Caracas, donde Di Stéfano sufrió un secuestro, afirmó que es "un honor despedirse de una figura tan grande. Aunque no lo vi jugar nunca, conozco la historia de Di Stéfano y el Real Madrid. Viviendo en la capital de España sentía la necesidad de decirle 'adiós'" a la Saeta.
Durante su estancia en Colombia, adonde llegó después de una huelga de futbolistas en su país natal, Argentina, Di Stéfano hizo historia junto a otros jugadores gauchos como Néstor Raúl Rossi o Adolfo Pedernera, dominando el fútbol colombiano.
En los cuatro años que Di Stéfano jugó en el equipo azul de Bogotá, 'la Saeta', única persona en ganar el 'Súper Balón de Oro', consiguió cuatro títulos (tres ligas y una Copa) y fue ganador dos veces (1951 y 1952) de la bota de oro del fútbol cafetero.