La violencia en el fútbol colombiano cobró una vida

La víctima fatal fue identificado como Johan Camilo Restrepo, de 21 años, tras recibir un disparo en la cabeza el domingo en la noche, según las autoridades. "Fue asesinado cuando intentó quitarle un bolso a una niña de 17 años, que iba acompañada por unos hinchas del Nacional", informó el lunes el comandante de la policía metropolitana de Medellín, general Yesid Vásquez. Restrepo lucía la camiseta verde del Nacional. El presunto agresor murió en la Policlínica Municipal, donde la muchacha se recupera de tres puñaladas. Otros ocho hinchas heridos, uno de ellos con arma de fuego, fueron trasladados al Hospital General. Los agentes de seguridad decomisaron antes y después del partido más de 450 armas blancas y encontraron una pistola en un jardín cerca del estadio Atanasio Girardot. Barrabravas atacaron a la policía con palos y causaron daños en locales y residencias cerca del estadio, luego de la victoria 2-1 de Independiente Medellín ante Nacional en el cierre de la séptima fecha del torneo Apertura. El aparato de seguridad conformado por 1.000 agentes no fue suficiente para impedir los choques.

La violencia en el fútbol colombiano cobró una vida

Un nuevo episodio de vandalismo ensucia el balompié nacional. Un muerto, nueve heridos y 315 retenidos, es el saldo luego del clásico paisa entre Nacional y Medellín.

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