Cuatro representantes del plantel, encabezados por el capitán, Claudio Bravo, acordaron con la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) de Chile el sistema de compensación económica que regirá las eliminatorias mundialistas.
Los montos que recibirán los jugadores chilenos dependerán de la clasificación en la que quede Chile después de cada partido.
Cuadrado el incentivo para el primer juego; a partir del segundo partido, el próximo martes frente a Perú en Santiago, los premios dependerán de la situación de Chile en la tabla clasificatoria y solo recibirán dinero si están entre los cinco primeros.
De este modo, si Chile llega al choque frente a Perú como líder de las eliminatorias y además se impone al cuadro andino, lo máximo que recibirán los jugadores por un triunfo en casa serán 200.000 dólares.
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Los dirigentes de la ANFP calculan que al término de las eliminatorias, con Chile clasificado para Brasil 2014, se habrán desembolsado unos 4 millones de dólares en premios.
En tanto, el entrenador, el argentino Claudio Borghi, y el cuerpo técnico se repartirán 800.000 dólares si el combinado chileno se mete en el próximo Mundial.
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En lo meramente futbolístico, el entrenamiento del pasado miércoles sirvió para que Borghi probara alternativas en el once que se batirá con la Albiceleste el próximo viernes en Buenos Aires.
Con la baja por lesión de última hora de Osvaldo González, el seleccionador chileno retrasó a Arturo Vidal a la zaga y probó a Felipe Seymour en la medular junto a Carlos Carmona.
La principal novedad en el entrenamiento fue la alineación de Matías Fernández y Jorge Valdivia como creativos, con Mauricio Pinilla y Humberto Suazo en punta.
Este ambicioso dibujo táctico, sin embargo, parece poco probable que se vea desde el inicio en el Estadio Monumental bonaerense, y los analistas locales se inclinan por la titularidad de Fernández, del Sporting de Lisboa.
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La selección realizará este jueves una última práctica en suelo chileno y viajará este jueves en horas de la tarde a Argentina.
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