La selección que ha hecho natural la nacionalización de jugadores es Paraguay, con tres sin sitio en la ‘albiceleste' como el goleador Lucas Barrios, quien incluso pudo ser chileno al desarrollar buena parte de su carrera en Chile.
También el medio Néstor Ortigoza, llamado incluso por Maradona en 2008, sin llegar a debutar, y que un año más tarde pasó a defender a Paraguay gracias a la gestión de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF).
El tercer "guaraní" nacido en Argentina a las órdenes de Gerardo Martino es Jonathan Santana, quien ya jugó la Copa América de 2007 de Venezuela y el Mundial de Sudáfrica.
Por su parte, la Chile de Claudio Borghi, nacido en Argentina y con pasaporte chileno, cuenta con Matías Fernández, argentino con padre chileno, y Jorge Valdivia, venezolano de parientes chilenos.
Uno de los jugadores más perseguidos en Bolivia por su gol ante Argentina en el debut es Edivaldo Rojas, un brasileño nacionalizado días antes de empezar la Copa América, desde el principio titular para el técnico argentino-boliviano Gustavo Quinteros.
Otras selecciones con nacionalizados son: Ecuador, que cuenta con dos nacidos en Argentina, Marcelo Elizaga y el central Norberto Araújo y México, cuyo lateral Miguel Ángel Ponce nació en California, Estados Unidos.
La anfitriona, Argentina, tiene entre sus 23 a Gonzalo Higuaín, nacido en Brest (Francia), cuando su padre Jorge Higuaín jugaba en la liga francesa, aunque a los diez meses viajó a Argentina, país al que decidió defender.