Este miércoles desde las 7:45 p.m. brasileños y argentinos comenzarán su participación en el torneo de fútbol más importante del continente.
Flamengo y River Plate comenzarán a jugar en la Copa Libertadores con un estadio Nilton Santos vacío, por la sanción de dos fechas que le impuso la Conmebol a los brasileños por los desórdenes protagonizados en la final de la Copa Suramericana contra Independiente.
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Y es que los más de 500 hinchas que llegaron de Flamengo a inmediaciones en donde se hospedaba el elenco gaucho, causaron estragos obligando a las autoridades a usar gases lacrimógenos para dispersar el grupo, que con pirotecnia pretendió molestar la noche de descanso de la delegación que jugaba al otro día por el titulo internacional.
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Por ello, este miércoles, el escenario que cuenta con un aforo de 46.931 puestos para los hinchas, tendrá que ser un solitario testigo del importante partido, que contará con tan solo los jugadores, cuerpos técnicos, delegados de los equipos y de la Conmebol en sus instalaciones.
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Uno de los momentos de mayor tensión con los hinchas de Flamengo en el hotel de Independiente en Río. (@TyCSports) pic.twitter.com/mvupDCvz7r
— A. Gabilondo (@AS_AGabilondo) December 13, 2017