Cuando desde el entorno de los dirigidos por Sixto Vizuete se percataron de la presencia de Milla, se detuvo el entrenamiento y se solicitó al segundo entrenador de España que dejara el lugar y él se retiró.
En la delegación española han considerado el incidente como "un asunto sin mayor importancia" y en el que "por supuesto, no ha habido ninguna intención de entorpecer el entrenamiento de Ecuador".