Esa fue la expresión usada por el seleccionador de ciclismo, Davide Cassani, para resumir un sentimiento común entre los apasionados de la bicicleta.
Acostumbrados a pedalear a diario, para entrenarse para la competición o para dar un simple paseo el fin de semana, los apasionados de ciclismo italianos viven una auténtica abstinencia, con el deseo de poder regresar, en el respeto de las reglas de seguridad establecidas por el Gobierno, a salir con sus bicicletas al aire libre.
Unas emociones resumidas recientemente por el seleccionador italiano, Cassani, en un mensaje publicado en sus redes sociales dirigido al Gobierno, en el que pidió la posibilidad de volver a entrenar a partir del 4 de mayo, aunque de forma individual.
"Somos como perros con correa, y esta correa es cada vez más corta y el collar apretado. Nos falta espacio, nos falta aire. Queridos amigos, sabéis que fui el primero en animar a que se respetaran las medidas, eran necesarias para enfrentar esta calamidad (el coronavirus). Pero ahora que lo peor ya ha pasado, sin gritar ni levantar la voz, pregunto: '¿Ya puedo salir?'", escribió Cassani en su cuenta oficial de Facebook.
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"No veo peligros en salir a correr, de forma individual, ni en coger una bicicleta, siempre pedaleando de forma individual", agregó el seleccionador italiano.
Eso sí, destacó Cassani, hay que hacerlo en el total respeto de las reglas de seguridad.
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"Hay que respetar las distancias, llevar una mascarilla, tener máximo cuidado, y conseguir que el deporte se convierta realmente en un medicamento regenerador. La Organización Mundial de Salud confirma que la actividad física es fundamental y yo creo que el deporte hace bien, sobre todo en estos tiempos de coronavirus, es suficiente practicarlo individualmente. ¿Podemos?", preguntó el seleccionador italiano.
Una línea que compartió también el presidente de la Federación de Ciclismo italiana, Renato Di Rocco, quien aseguró que el ciclismo está "listo para volver".
"También el ciclismo está listo para reanudar la actividad. A la espera de los estudios del Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI), el consejo federal de la Federación ha abierto un procedimiento para volver a los entrenamientos en cuanto llegue el visto bueno de las instituciones competentes", se lee en un comunicado oficial facilitado recientemente por la federación.
Y es que el brote del coronavirus en Italia, con los primeros casos detectados el 20 de febrero, cambió radicalmente los ritmos de vida de los ciclistas italianos, también por lo referido a las carreras de profesionales.
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Marzo iba a ser el mes del célebre tríptico, Strade Bianche, Tirreno-Adriático y Milán-Sanremo, y el prólogo del Giro de Italia, previsto en mayo.
Todas estas carreras han sido aplazadas a causa de la pandemia y, de momento, la fecha prevista para la disputa del Giro de Italia es el 3 de octubre.
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La Strade Bianche, que se corre en la zona de Siena, en Toscana, la Tirreno-Adriático, carrera por etapas que "toca" los dos mares del oeste y este de Italia, y la "classicissima" Milán-Sanremo, todavía no tienen una fecha prevista para disputarse.
Mientras, otros deportes, como el voleibol, el baloncesto o el rugby ya renunciaron definitivamente y declararon cerradas sus temporadas ante la incertidumbre sobre las reales posibilidades de terminar el año.
La Federación de Voleibol italiana también informó este jueves, de acuerdo con la Federación Internacional de este deporte (FIVB), que el Mundial de voley playa de Roma 2021 se disputará finalmente en 2022, pues las actuales condiciones sanitarias impiden empezar a tiempo su organización.