La colombiana Caterine Ibargüen, campeona mundial de triple salto, se aseguró hoy el primer puesto en la Liga de Diamante y el premio de 40.000 dólares que va de la mano, al imponerse en la reunión de Estocolmo con una marca de 14,61 metros.
Exactamente una semana después de dar a Colombia la primera medalla de oro en unos campeonatos del mundo con un salto de 14,85, Ibargüen ha ratificado en la capital sueca su hegemonía mundial, batiendo, como en la final mundialista de Moscú, a la ucraniana Olha Saladuha, hoy segunda con 14,07.
La colombiana necesitaba sólo una victoria más -la quinta, pues ya venció en Shanghai, Eugene, Oslo y París- para asegurarse el título de la Diamond League y fue en su busca desde el primer salto, de 14,40. Progresó diez centímetros en el segundo, pese a un viento frontal de un metro, y ya no volvió a mejorar hasta la última ronda, en la que se despidió con su marca ganadora.
Invicta durante el presente año, Ibargüen tiene el récord de la reunión de Estocolmo con los 14,83 metros que le dieron la victoria en 2011.
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Saladuha, campeona mundial en 2011 y medallista de bronce la semana pasada en Moscú -por detrás de la rusa Ekaterina Koneva, ausente aquí-, logró hoy su mejor registro en su tercer salto.
El pasado día 15, Caterine Ibargüen, subcampeona olímpica en Londres 2012, escribió un capítulo de oro en la historia del atletismo sudamericano al proclamarse campeona del mundo -primer título mundial para Colombia-, dos años después de convertirse en la primera atleta de esta nacionalidad que ganaba una presea en la competición (bronce en Daegu).
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Estocolmo (Suecia)
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