Mundial de Rugby: Irlanda, con un Jonathan Sexton, aplastó 82-8 a Rumania

Irlanda, primer clasificado en el ranking de World Rugby, tuvo un debut perfecto en el Mundial de Francia, arrollando 82-8 a Rumanía, este sábado en Burdeos.

La victoria se vio acompañada además de la bonificación ofensiva, en un partido en el que Irlanda firmó doce tries, por medio de Jamison Gibson-Park (minuto 5), Hugo Keenan (12), Tadhg Beirne (17, 83), Bundee Aki (34, 75), Jonathan Sexton (40, 62), Rob Herring (45), Peter O'Mahony (50, 70) y Joe McCarthy (67).

Jonathan Sexton, el apertura 114 veces internacional con Irlanda, firmó un total de 24 puntos en el partido. Inició así a lo grande su cuarto Mundial y elevó a 1074 puntos su cuenta de puntos con el XV del Trébol, a apenas 9 del récord de otra leyenda nacional, Ronan O'Gara, a la que presumiblemente dejará pronto atrás en este Mundial.

Con 102 puntos, Sexton se convirtió además en el jugador irlandés que más ha sumado en Mundiales, dejando atrás los 93 que marcó O'Gara.

A sus 38 años y después de volver tras una lesión que le tuvo seis meses de baja se convirtió además en el jugador de más edad en representar a Irlanda.

"La edad es solo un número. Estoy encantado de estar de vuelta para vivir algo así. Ha sido una espera larga y estoy agradecido por estar de vuelta", declaró Sexton. "Necesitaba un partido para probarme. Hubo bastantes cosas buenas y otras a mejorar, tanto individual como colectivamente", apuntó.

Los rumanos habían abierto el marcador con un try, obra de Gabriel Rupanu (3), pero a partir de ahí la máquina irlandesa empezó a funcionar a pleno rendimiento.

"Hubiéramos firmado un resultado así antes del partido", celebró el seleccionador del XV irlandés, Andy Farrell.

Con esa victoria acompañada de bonificación, Irlanda es líder del grupo B, a la espera de que Sudáfrica se enfrenta a Escocia el domingo.

El siguiente partido de Irlanda en el Mundial será contra Tonga el sábado de la próxima semana (19h00 GMT), antes de medirse el 23 de septiembre a Sudáfrica y el 7 de octubre a Escocia. Esos dos últimos partidos se jugarán en el Stade de France, en la periferia de París.