Milton Rodríguez cumple 36 años en abril pero corre como si tuviera 15 menos y mantiene la eficiencia de hace diez, cuando fue goleador del fútbol colombiano: en la tercera fecha lleva cuatro goles que tienen como líder al Atlético Huila y está en la parte de arriba de la tabla de anotadores.
Este Huila va en serio. Néstor Otero, que tuvo un trabajo de pretemporada callado y sin muchas luces, tiene un equipo que maneja los partidos, que es experto en el contragolpe defendiéndose muy bien y que es pura eficiencia en el frente de ataque.
Ya lo había mostrado en la primera fecha con el 3-0 a Chicó, quedó claro en el empate de la jornada pasada en Bogotá con Millonarios y, por si las dudas, lo ratificó en un clásico en el que el Tolima siempre pareció ser el dueño del partido pero nunca pudo intimidar realmente a Estacio.
Porque el Tolima de Bernal, que venía de dos victorias consecutivas, no estaba listo para enfrentar a un equipo que lo esperó, lo dejó avanzar y desgastarse en el infierno de casi 40° del Plazas Alcid y lo golpeó cuando más le dolió: en el minuto 42, cuando todo hacía indicar que el ganador debería ser la visita, sólo que Milton no estuvo de acuerdo.
Publicidad
En ese minuto el veterano goleador soltó un remate de media distancia (la única arma que había mostrado hasta el momento el Huila con él, Palomino y Sebastián Hernández) que rebotó antes de que Silva la atajara y engañó totalmente al arquero paraguayo del Tolima.
Era curioso el resultado pues el desgaste parecía de los de vinotinto y oro. La movilidad de Juan Carlos Escobar, Cristian Marrugo y Robin Ramírez era vistosa, pero poco efectiva. En cambio el Huila cobró en la que pudo y se dispuso a seguir con su juego para el segundo tiempo.
Publicidad
Es interesante el manejo de tiempos de Huila: Palomino pone la velocidad y el cambio de ritmo, Hernández la pausa y el pase preciso (luego lo reemplazaría Nelson Barahona cumpliendo esa misma función) y Johnatan Álvarez es el despliegue y el socio de todos abriendo el campo.
Precisamente así, por las bandas, llegó el segundo. Mientras Tolima naufragaba en su intención ofensiva, un centró encontró libre a Milton que, con un cabezazo magnífico, puso el 2-0 al minuto 79.
Sin embargo, faltaba la guinda para esta lechona opita que se cocinó en Neiva: al 86 Álvarez y Barahona se inventaron una pared en el área (que incluyó un taco delicioso del panameño) y el ex Nacional entró libre, gambeteó a Silva y puso el 3-0.
Huila es líder, el clásico del Tolima Grande fue para Neiva y hoy, sin lugar a dudas, la lechona es opita. Ahora el equipo del 'Matemático' debe demostrarlo en Cúcuta la próxima fecha, mientras Tolima tratará de limpiar la herida recibiendo a Equidad.
Publicidad