Será la primera vez que China acuda a la máxima competición sudamericana de naciones, en la que la vecina Japón ya participó como país invitado en la edición de 1999.
Al parecer el equipo japonés también había sido invitado a jugar en Chile 2015, pero tras rechazar la oferta la organización optó por China, un país donde el torneo latinoamericano es seguido por muchos aficionados, pese a las horas intempestivas a las que se suele retransmitir.
La selección china, actualmente en el puesto 88º en la clasificación mundial de la FIFA, podría encontrarse en 2015 con el poco usual honor de tener que disputar dos máximos torneos continentales, ya que el próximo año también se disputa la Copa de Asia de naciones, en Australia.
Sin embargo, el torneo asiático se disputará en enero y el latinoamericano en junio y julio, por lo que sus calendarios no se solaparán, y en todo caso China todavía no ha asegurado su pase para Australia, algo que depende del decisivo encuentro que el próximo miércoles, 5 de marzo, jugará ante la selección de Irak en Dubai.
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Desde 1993, la Copa América invita en cada edición a dos naciones no pertenecientes a la confederación suramericana (CONMEBOL, con 10 miembros) para poder organizar una fase de grupos de 12 selecciones (tres grupos con cuatro equipos cada uno).
Los invitados más habituales son selecciones de Norteamérica (como EEUU, Costa Rica, Honduras o México, país este último que también acude a Chile 2015), aunque también ha habido ofertas como la mencionada a Japón o la que España rechazó en la última edición de 2011, organizada por Argentina y ganada por Uruguay.
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