Así lo publican estos martes medios portugueses, que apuntan a que los futbolistas involucrados enfrentaran una pena que puede ir desde la multa económica hasta los tres años de prisión.
Los hechos, ocurridos hace casi dos años, ya fueron analizados por la Comisión Disciplinaria de la Liga portuguesa, que decidió suspender durante cuatro meses al delantero estrella del Porto, Hulk, y por seis meses al defensa Sapunaru, mientras que optó por archivar el caso contra el portero Helton.
El castigo a Hulk y Sapunaru fue reducido sensiblemente con posterioridad a sólo tres y cuatro encuentros, respectivamente, aunque para entonces ya habían cumplido la mayor parte de su pena inicial.
El Ministerio Público, según informan los medios lusos, presentará las imágenes de las cámaras de videovigilancia, fotografías y partes médicos para sustentar su acusación, que deberán ser evaluados por el juez de instrucción antes de decidir si seguir adelante con el proceso.
Publicidad
Los vigilantes agredidos relatan en su denuncia cómo varios jugadores del Porto les propinaron patadas y puñetazos después de que les impidieran acceder al trío arbitral, tras haber caído derrotados con el Benfica por 1-0.
Los futbolistas han sido acusados de un delito de ofensa a la integridad física.
Publicidad
Ambos clubes, Benfica y Porto, declinaron hacer comentarios sobre la acusación de la Fiscalía.
Sin embargo, el presidente de los "dragones", Nuno Pinto da Costa, se mostró sarcástico con esta decisión y preguntó retóricamente si el Ministerio investigará de la misma forma el intento de agresión del entrenador brasileño Luiz Felipe Scolari al jugador serbio Ivica Dragutinovic en septiembre de 2007.
El entonces seleccionador de Portugal se enfrentó al término del encuentro disputado en el estadio José Alvalade entre su equipo y el conjunto serbio con el ex sevillista Dragutinovic, una acalorada discusión por la que la UEFA le castigó con cuatro partidos de suspensión.