El equipo albo viene de derrotar la semana pasada al Atlético Mineiro brasileño por 2-0 con una sólida demostración de buen fútbol pero se encontrará con un rival que también ganó en el arranque, 1-0, sobre el Atlas mexicano.
Paredes sufrió una contractura en el partido con Atlético Mineiro y estuvo ausente el pasado domingo en el empate 1-1 con el Palestino, en el torneo Clausura local.
Los albos, dirigidos por Héctor Tapia, cumplieron una actuación épica en ese partido, pues jugaron desde el minuto 39 con nueve jugadores, tras ser expulsados el centrocampista argentino Emiliano Vecchio y el goleador Humberto ‘Chupete' Suazo.
Esa actuación solidificó aún más la ya alta moral del equipo, que se ha propuesto alcanzar "cosas mayores" en la Copa América, torneo que ya ganó en 1991.
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Junto con lamentar la baja de Esteban Paredes, los albos festejaron la recuperación del central argentino Julio Barroso y del delantero Felipe Flores, que estaban con problemas musculares de los que se recuperaron y viajaron a Colombia con la plantilla.
"Julio manifestó un edema muscular en el aductor durante el partido con Atlético Mineiro y decidimos pararlo este fin de semana para bajar esa sintomatología. Ya está en condiciones y el técnico va a decidir si puede jugar o no", dijo el médico del club, Wilson Ferrada.
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Respecto de Flores, indicó que "ha recibido dos golpes en su cuádriceps y no tiene ningún problema, solo contusiones propias de la alta competencia".
Según fuentes del club, es probable que el técnico Héctor Tapia, con la novedad de Barroso en lugar del paraguayo Leonardo Cáceres, repita ante el Independiente Santa Fe la formación que se enfrentó al Palestino: Justo Villar, Gonzalo Fierro, Julio Barroso, Cristián Vilches, Jean Beausejour; Esteban Pavez, Jaime Valdés, Emiliano Vecchio; Humberto Suazo, Felipe Flores y Juan Delgado.