Todo tiene un inicio y el de Reina en el fútbol fue desde la pasión que sentía por ese deporte. "Es mi pasión desde que tengo uso de razón, por eso luché y le aposté todo a lo que quería ser desde pequeño". El camino de las decisiones arrancaba en ese momento.
Luego, un tiempo después, asesorado por su familia, inició el proceso en busca de un equipo que quisiera y pudiera contar con él. Aunque su padre es hincha del Deportivo Cali su destino sería el ‘rival de patio', América de Cali. "Cuando decidimos tocar puertas para empezar, en América se facilitó mucho más ir hacer las pruebas. Además, en el Cali no, las inscripciones estaban cerradas."
A raíz de sus buenas actuaciones con el equipo ‘escarlata', Javier fue llamado a la selección Colombia Sub-20, en donde pudo sentir lo que significó vestir la camiseta nacional, que para él es "es lo mejor q le puede pasar a uno como jugador de fútbol".
De allí, una nueva y difícil situación llegaba a su carrera. El fútbol brasileño lo quería por lo que estaba demostrando.
Publicidad
Con 19 años, asumió uno de sus grandes retos, ser parte del Cruzeiro en Brasil. "La vida está llena de retos y me gustan los retos. Este era un nuevo en mi vida y quería vivirlo. La motivación más grande para tomar la decisión fue ir al fútbol de los cinco veces campeones del mundo."
Sin embargo, para 2011, el fútbol coreano lo atrajo. Así tomo la decisión de emigrar al lejano oriente. "En esta carrera, que por cierto sabemos que es muy corta, siempre estamos en busca de lo mejor para nosotros y para nuestra familia. Fue una gran oportunidad de tener una mejor condición financiera."
Publicidad
Un año más tarde, pensando en la Selección Colombia, tuvo la posibilidad de regresar al fútbol brasileño. Ceará, equipo en el que ya había jugado antes de partir a Corea, fue su destino.
Regresó a Ceará para "pelear cosas importantes, ganar títulos, poder ser llamado a la Selección y dejar mi nombre de nuevo sonando, como se dice por ahí. Lógicamente siempre será una motivación llegar al fútbol brasileño."
Algo de eso logró, se coronó campeón del torneo estadual Cearense. Lamentablemente, el ser llamado a representar al país no lo consiguió y Corea volvió a ponerse en su camino.
"Gracias al excelente trabajo y gran nivel futbolístico que gané con Ceará, vuelven a buscarme y ahora con una mejor propuesta financiera de la que había tenido antes. Era difícil decir que no."
Publicidad
Con el paso del tiempo y las decisiones las prioridades cambian. Sin haberlo querido así, la motivación de jugar para Colombia pasó a un segundo plano.
"Nunca he renunciado a la posibilidad de jugar con Colombia, ni lo haré. Inclusive es mi mayor motivación y lo seguirá siendo. Pasa que hay momentos en los que las cosas no salen como lo esperabas y al ver que no sucede así vienen otras prioridades."
Publicidad
Como cualquier otra persona, Reina debe buscar el sustento para su familia, y esa es la razón por la cual decidió partir, de nuevo, al fútbol asiático, en esta oportunidad al Seongnam Illwha, equipo en el que jugaba Mauricio Molina.
"Yo hago lo que hago por un mejor futuro para ellos y por ellos me esfuerzo cada día. Yo sé que si las cosas en mi carrera las hago bien, ellos estarán bien."
Aun así, Javier no pierde el sueño que tuvo siempre, el de vestirse con la ‘tricolor'. Si bien para algunos esa ilusión pierde el encanto por estar tan lejos, para él no.
"Personalmente no la he perdido. A veces por estar haciendo un buen trabajo y no ser llamados ya pasa a un segundo plano y vienen otras prioridades."
Publicidad
En su segundo capítulo en Corea se rumoreó que vendría al país a jugar con Millonarios. Sin embargo, no tuvo que decidir nada, nunca hubo propuesta: "Con ellos hubo un acercamiento solamente. Si bien había interés de las dos partes solamente se dialogó. Al final no era nada concreto. No hubo exigencias, ni condiciones, simplemente hubo un dialogo, nada más. No había que tomar ninguna decisión, la realidad es una sola y mi presente es uno solo. Hay un contrato de 2 años por cumplir con el equipo coreano y aquí estoy."
En un futuro espera poder tomar la decisión de volver al fútbol nacional, siempre y cuando "las condiciones y ofrecimientos sean de mi agrado y se acoplen a lo que quiero junto a mi familia."
Publicidad
Finalmente Javier Reina siente que su mejor decisión fue "el aceptar irme al fútbol del exterior, aun siendo tan joven." Mientras que de la peor dijo, "he cometido muchos errores, pero de cada momento siempre intento sacar alguna cosa positiva. De esos momentos difíciles intento aprender y crecer como persona y profesional. Si tomé malas decisiones pero no las llamaría así, ni tengo una que pueda llamar la ‘peor', porque hasta de los peores momentos siempre algo bueno y positivo hay para mí."