La victoria del conjunto brasileño la materializaron Fabrizio (m.6), Jabá (m.75) y Antonio (m.83).
El Corinthians, que ya se había impuesto al conjunto colombiano en la fase de grupos (3-1), se volvió a mostrar superior a un rival que había ofrecido buenas sensaciones en los partidos previos y que había dejado en semifinales en la cuneta al entonces vigente campeón Real Madrid, en la tanda de penaltis.
Se trata del tercer título del Corinthians en este oficioso mundialito sub-17 de clubes, pues con anterioridad había alzado el trofeo en 2010 y 2011. Además, fue subcampeón en 2014.