Riquelme, de 34 años, se alejó del equipo más popular de Argentina tras su derrota ante Corinthians en la final de la Copa Libertadores 2012 por sentirse "vacío", sin motivaciones para continuar en sus filas.
Reiteró esa posición el mes pasado tras varias negociaciones infructuosas para incorporarse a otros equipos de Argentina y Brasil, hasta que el último lunes cambió de opinión, llamó telefónicamente al entrenador Carlos Bianchi y le ofreció volver, días después de la derrota boquense ante su histórico rival, el River Plate, por 2-1 en un partido amistoso.
Riquelme logró que el club suspendiera su contrato, sin cancelarlo, lo cual interpretado como una señal de que el futbolista nunca pensó en colgar las botas todavía.
Fuentes del club indicaron en el presidente del club, Daniel Angelici, con quien el jugador estuvo reunido este viernes, ofrecerá en horas de la noche una rueda de prensa.
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