Los atentados coordinados, reivindicados por el grupo insurgente Estado Islámico, se produjeron en bares, restaurantes y una sala de conciertos en París, además de en las afueras del Stade de France, en unos hechos que además dejaron unos 352 heridos.
"La fase final de la Eurocopa se jugará como estaba planeado, en Francia del 10 de junio al 10 de julio", sostuvo la UEFA en un comunicado.
"Tras los dramáticos hechos ocurridos el viernes en París, la UEFA y el Comité Organizador quieren reafirmar su compromiso respecto a que la seguridad estará en el centro de sus planes", señaló el escrito, que destacó que la entidad no tiene razones para creer que se produzcan atentados durante el torneo.
Los ataques fueron la peor agresión en territorio francés desde la Segunda Guerra Mundial.
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"Desde hace tres años, el comité organizador de la Euro 2016 ha estado trabajando de cerca con las autoridades correspondientes para desarrollar los mecanismos apropiados para garantizar la seguridad del torneo y confiamos en que se tomarán las medidas necesarias para asegurar que así sea para todos quienes participen del mismo".
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