La Federación inglesa analiza que las frases que el defensa del Chelsea John Terry dijo al jugador del Queens Park Rangers Anton Ferdinand, hermano de Rio, la pasada temporada en un partido de Liga fueron insultos racistas, según un documento hecho público este viernes en el que pone por escrito las acusaciones que pesan sobre el excapitán de la selección de Inglaterra.
A partir de la publicación de las 63 páginas en las que se detallan los argumentos para sancionar a Terry, el jugador cuenta con un plazo de 14 días para apelar la multa de 220.000 libras (277.000 euros) y cuatro partidos de sanción que la FA le impuso la pasada semana.
El máximo organismo del fútbol inglés llegó a una conclusión opuesta a la que emitió un tribunal ordinario el pasado mes de julio, cuando un magistrado absolvió a Terry de comportamiento racista al aceptar el argumento de la defensa, que aseguraba que el defensa del Chelsea tan solo repetía unas palabras que antes había pronunciado Ferdinand.
Según la Federación, no hay una "base creíble" para aceptar ese argumento y, en cambio, encuentra "satisfactorio" creer que "las palabras ofensivas fueron utilizadas a modo de insulto".
El hecho de que Terry hubiera pronunciado palabras en referencia al color de la piel de Ferdinand el 23 de octubre de 2011 en Loftus Road no estaba en entredicho para la FA, como tampoco lo estuvo para los tribunales ordinarios, que lo consideraron probado a través de un vídeo del encuentro.
La Federación juzgó que la intención del jugador era insultar a Ferdinand tras escuchar a las partes implicadas del 24 al 27 de septiembre, casi un año después del incidente entre ambos futbolistas.
Durante el proceso, el caso ha tenido consecuencias en la selección inglesa: el entonces seleccionador, el italiano Fabio Capello, dimitió en febrero al estar en desacuerdo con la retirada de la capitanía a Terry antes de ser juzgado.
Meses después el mismo jugador renunció a volver a vestir la camiseta de la selección a raíz de sus malas relaciones con la Federación.