La semana pasada el Once Caldas tuvo que aceptar públicamente que necesitaba $6 mil millones para cumplir con la Ley 1446 o se iba a liquidación. La situación era insostenible, los jugadores amenazaron con renunciar en bloque por las múltiples deudas e incluso Mauricio Casierra dijo en La Patria: "El gerente debe precisar cuánta plata nos debe a cada uno de nosotros. Claro, a los más jóvenes con cualquier cosa que les dan, quedan a paz y salvo, ¿pero a los referentes del equipo qué?".
Sin embargo, todo cambió este martes cuando se anunció que Kenworth de la Montaña es la nueva dueña del 37% del club, y entrará con una capitalización de $1.200 millones.
En medio de alegría y fiesta, y con unos jugadores que ya no están molestos, se anunció una transformación absoluta en el orden dirigencial, y con la presencia de las altas cabezas de Kenworth de la Montaña en América Latina se anunció que Marcelo Mejía, Fabio Aristizábal, Jaime Pineda, Mauricio Pineda y Carlos García integran la nueva junta directiva, mientras Rafael Castañeda será el gerente.
Ellos llegan con $700 millones que sirven para pagarle a jugadores, cuerpo técnico y empleados administrativos. Mañana ya estarán al día todas las deudas salariales.
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Este empuje, además, promete buscar títulos y figuración internacional pues, como lo señaló Luis Montoya, asesor de Kenworth, la marca busca posicionamiento en un mercado que domina, como el colombiano, y la mejor forma de hacerlo es teniendo a un Once Caldas que dé la pelea no sólo en el país, sino en el continente.
La horrible noche del blanco llegó a su fin y el futuro se abre vía... con la potencía de un camión.
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