La UEFA sanciona por una temporada al Galatasaray

Galatasaray fue apartado de todas las competiciones en el viejo continente durante una temporada, sanción que será aplicable por un periodo de dos años. 

Si el Galatasaray no alcanza en el vigente campeonato una plaza europea para el curso que viene, la sanción se pospone hasta la temporada 2017-2018. Si el club de Estambul se clasifica en mayo para la próxima Liga de Campeones o la próxima Europa League, podría volver a las competiciones continentales en el curso 2017-2018. 

El equipo turco, que jugó la Liga de Campeones antes de pasar a la Europa League, no respetó la vuelta al equilibrio presupuestario que prometió para la temporada 2015-2016, anunció la UEFA a mediados de enero, antes de transmitir su informe a la cámara judicial de la Instancia de Control Financiero de los Clubes (ICFC). La UEFA además ha decidido controlar su masa salarial del club los próximos dos años.

"Debemos pagar nuestra pena tras haber disfrutado del derecho de jugar en Europa. Tenemos que seguir economizando el dinero", reconoció el secretario general del club Fatih Isbecer a la agencia DHA. "En un año debemos tener listo nuestro plan para volver jugar la Liga de Campeones (si se clasifican los dos años seguidos). No es necesario ser muy pesimistas", añadió el directivo.

El Galatasaray, donde juegan entre otros el campeón del mundo alemán Lukas Podolski, el subcampeón mundial de 2010 holandés Wesley Sneijder y el portero de la selección uruguaya Fernando Muslera, terminó este año tercero del Grupo C de la Champions, por detrás del Atlético Madrid y Benfica de Lisboa.

En su primera eliminatoria en la Europa League, fue eliminado en dieciseisavos por la Lazio (1-1 y 3-1). El martes dimitió su segundo entrenador de la temporada, Mustafa Denizli, tras solo tres meses en el cargo.

A mediados de enero, la UEFA anunció que el Hull inglés, el Panthinaikos griego y el Sporting Lisboa había cumplido con sus compromisos con el fair-play financiero y no serían objeto de más investigaciones, todo lo contrario que el Galatasaray.

El principio básico del fair-play financiero es que un club no puede gastar más de lo que gana, o podría quedar excluido de las competiciones continentales.