El cuadro paisa, que había logrado un empate 1-1 hace una semana en Paraguay, fue muy superior la mayor parte del encuentro al 'danzarín', que se mostró luchador, pero generó muy poco fútbol en el área del local.
Atlético Nacional, campeón de la Copa Libertadores de este año, enfrentará en los cuartos al vencedor del duelo entre el brasileño Coritiba y el argentino Belgrano, que definirán su serie este miércoles en el estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba.
El cuadro verde buscó desde el primer minuto asegurar el partido, apegado a su tradicional libreto de posesión de balón, con transiciones rápidas de defensa a ataque y teniendo como eje creativo al talentoso Macnelly Torres.
Por su parte, el Sol de América esperó cerca de su área para frenar los ataques del local y con la idea de buscar alguna oportunidad de contragolpear o de cobrar alguna falta para mostrar su potencial aéreo.
En el primer tiempo, pese al buen transporte del balón, el vigente campeón de la Copa Libertadores careció de profundidad y se estrelló contra un buen dispositivo defensivo del once paraguayo.
El ‘charrúa' comenzó a animarse en ataque pasada la primera media hora de juego e incluso tuvo una clara oportunidad a los 35 minutos en jugada de Yonathan Samaniego que habilitó a Isaac Díaz, pero el delantero no pudo rematar ante la rápida salida del portero Franco Armani.
En la segunda mitad los dirigidos por Reinaldo Rueda salieron con mayor decisión y a penas en un par de minutos una sensacional jugada colectiva culminó con un remate de Orlando Berrío, que fue rechazado por el portero Agustín Silva de forma providencial.
La preocupación en la afición local llegó sobre los 50 minutos cuando el delantero Jhon Mosquera vio la segunda tarjeta amarilla tras una falta sobre Cristian Paredes.
Pero el 'Rey de Copas' colombiano no se asustó y mantuvo sus intenciones ofensivas y siete minutos después Bocanegra cobró un tiro libre de forma espectacular, ante la mirada del portero Silva que dio un par de pasos al lado contrario donde fue el balón y no pudo reaccionar.
La falta de contundencia y la inminente eliminación llenó de nervios a los paraguayos que entraron en una refriega, que a la postre terminó con la expulsión de Marcos Melgarejo a los 70 minutos, con lo que se emparejó de nuevo el número de hombres en cancha.
La expulsión liquidó las intenciones de Sol de América y permitió que los cafeteros recuperaran la posesión de la pelota y los ritmos del juego, con lo que se vio muy superior a los visitantes.
A ocho minutos del final una entrada en velocidad de Berrío por la franja derecha terminó con un remate violento que se le incrustó a Silva en el arco para el 2-0, desatando la tranquilidad y el jolgorio en los aficionados que ya piensan en los cuartos de final.
Ficha técnica:
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