Además, en un breve comunicado, la FFF agregó que se ha "llamado al orden" los internacionales Hatem Ben Arfa y Yann Mvila, aunque no han recibido sanción alguna.
Todos ellos podrán verse privados de parte o de la totalidad de las primas a las que tenían derecho por disputar el campeonato europeo de selecciones con Francia, agregó la FFF.
La federación citó a declarar a Nasri (Manchester City) por haber insultado públicamente a la prensa, algo que tras el incidente el jugador de 25 años consideró en Twitter como "un asunto personal entre algunos periodistas" y el propio centrocampista.
Ménez compareció por haber faltado al respeto al capitán, Hugo Lloris, y por haber insultado al árbitro del España-Francia (2-0).
Publicidad
El jugador, que no pudo presentarse en la federación por encontrarse de gira por Estados Unidos con el París Saint-Germain (PSG), estuvo representado por su abogado, quien declaró a la prensa que la falta que se le atribuye es un "error de juventud".
"Lamenta profundamente lo que pasó y quiere olvidar esos momentos difíciles. Es un error de juventud y espera que la comisión (de disciplina) tenga en cuenta su arrepentimiento público" a través de una entrevista en "L'Équipe" el pasado lunes, declaró su abogado antes de conocer la sentencia.
Publicidad
La comisión hizo declarar también a Mvila (Rennes) por no haber saludado al entrenador y a su sustituto, Olivier Giroud, al ser reemplazado en ese mismo partido y a Ben Arfa (Newcastle) por haberse enfrentado contra el exseleccionador Laurent Blanc en el vestuario galo tras la derrota contra Suecia por (0-2).
El entorno de Ben Harfa protagonizó este mismo viernes un enfrentamiento en a la entrada de la federación, cuando se produjo un forcejeo entre el padre y el agente del jugador.
El padre de Ben Harfa intentó agredir a su representante, Michel Ouazine, a quien le acusó a gritos de haberle robado a su hijo.
"Me has robado a mi hijo. ¿No te da vergüenza? Hace tres años me robó a mi hijo", gritaba Kamel Ben Arfa, quien asegura que no ha visto al centrocampista desde hace cinco meses y que solo pretendía "darle ánimos".
Publicidad
También fue invitado a declarar Blanc, aunque no se le reprocha ninguna presunta falta.
El técnico decidió no prolongar su contrato de dos años tras la eliminación de la Eurocopa, cediendo su puesto al actual seleccionador, Didier Deschamps.
Publicidad
El nuevo culebrón del fútbol francés recuerda al llamado "motín de Knysna" del Mundial de Sudáfrica, cuando los internacionales se negaron a entrenar, protagonizaron un escándalo con huelga incluida y laceraron la imagen de la selección, criticada incluso por el entonces presidente, Nicolas Sarkozy.
Aquel perjuicio a la imagen de la selección gala se saldó con suspensiones como internacionales para Anelka (18 partidos), Evra (5), Ribéry (3) y Toulalan (1), mientas que Abidal, que también compareció ante la comisión de disciplina de la federación, fue absuelto.