El polémico juego en mención se disputaba el 21 de diciembre y cuando el marcador era de 1-0 a favor de Ajax, un hincha irrumpió sobre el césped y atacó al portero del AZ, el costarricense Alvarado, quien respondió con varias patadas al ataque del espontáneo.
Las fuerzas de seguridad del recinto tuvieron que intervenir y el árbitro Bas Nijhuis mostró la tarjeta roja al meta -sanción que fue posteriormente retirada por la federación-, después de lo cual el técnico visitante mandó a sus jugadores que abandonaran el terreno de juego.
El Ajax le prohibió al seguidor entrar en su estadio, el Amsterdam Arena, en los próximos 30 años, pudiendo la KNVB aplicarle un castigo semejante a escala nacional.
El espontáneo, de 19 años, se encuentra detenido desde el incidente bajo una acusación de maltrato.