El partido en el estadio Hernán Ramírez Villegas mostró dos oncenos con realidades opuestas. El conjunto local salía con la necesidad de sumar tres puntos valiosos que lo alejaran de la zona del descenso y más después de los buenos resultados que obtuvo América en las últimas fechas.
Por su parte, el Deportivo Cali viajó a Pereira con el objetivo de probar el equipo ideal que quiere su nuevo técnico, el argentino Rubén Darío Insúa. Sin embargo, en las filas caleñas preocupa la falta de buen fútbol de algunos de sus jugadores estrellas como Gabriel Fernández.
Los primeros minutos fueron de claro dominio matecaña. De los pies del ‘Totono' Grisales salieron las opciones más claras para que el conjunto pereirano se acercara al primero de la tarde.
El Pereira no sólo intentó llegar a la portería contraria por medio del toque entre Grisales y Germán Cano; la pelota quieta también fue una herramienta útil para generar peligro sobre el arco defendido por Leandro Castellanos. El aporte de Freddy Machado fue vital con su trabajo de marca y salida para que el equipo matecaña fuera el claro dominador de las acciones durante los últimos minutos del primer tiempo.
El nuevo Deportivo Cali del argentino Insúa no propuso opciones de ataque durante los primeros 45 minutos. Por el contrario, se mostró sólido en defensa y por medio de algunos contraataques se acercaba a la portería defendida por Robinson Zapata sin tener mayor peligro.
La primera mitad terminó sin una opción clara de gol para alguno de los dos equipos. De hecho, Germán Cano, goleador del torneo con siete tantos, no inquietó en ningún momento la portería azucarera.
El segundo tiempo empezó de manera distinta. El Cali salió con una actitud mucho más ofensiva y Fernández por fin apareció generando varias posibilidades de gol sobre la portería de Zapata. Gonzalo Martínez siguió siendo uno de los jugadores azucareros más importantes durante el compromiso, y por medio de sus avances el onceno caleño encontró la manera de hacer daño en la defensa matecaña.
El equipo de casa no encontraba el ritmo que había tenido durante los primeros minutos del compromiso. Grisales se convirtió en el creador de jugadas de ataque pero sus acciones individualistas no le permitieron a los matecañas generar gol.
Otro factor que frenó el juego ofensivo de los locales fue la cantidad de faltas que se dieron en la mitad del terreno de juego. El compromiso terminó con cinco tarjetas amarillas para el Pereira y seis para el Cali.
Desesperado por la falta de gol, el onceno pereirano empezó a explotar la banda izquierda para llegar a territorio contrario. Al minuto 26 Germán Cano se filtró entre la línea de los defensas y sacó un potente remate que terminó en gol pero que fue invalidado por un supuesto fuera de lugar del atacante.
El partido terminó con un frio empate que deja al Pereira en la octava casilla del campeonato pero que lo hunde más en la tabla del descenso. Por su parte, el conjunto azucarero se llevó un punto en condición de visitante y espera que de la mano de su nuevo técnico los buenos resultados no demoren en llegar.