Los vehículos ardieron durante la noche del lunes, presuntamente por aficionados del club italiano, que se encuentra en la última posición del campeonato, informó este martes la prensa deportiva.
"Estoy escandalizado. Al final de la temporada, yo lo dejo", declaró Daniele Sebastiani, citado por el Corriere dello Sport.
Durante la pasada noche, Sebastiani llamó a los bomberos para apagar las llamas que desprendían de sus dos automóviles.
Desde hace varias semanas, la tensión entre un grupo de seguidores y la directiva ha ido en aumento.
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El equipo dirigido por Marco Verratti, que ascendió a la primera categoría de la pasada campaña, sólo ha logrado nueve puntos en 23 jornadas.
La liga italiana, por su parte, mostró su solidaridad con el presidente del Pescara.
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"Tales actos de violencia y de intimidación no pueden ser tolerados en ningún caso, menos aún hacia un presidente que siempre ha gestionado un club con inmensa pasión y grandes esfuerzos", señaló la Serie A en un comunicado de prensa.
Según los medios italianos, la policía investiga las imágenes registradas por las cámaras de vigilancia para identificar a los responsables.