La dolorosa actualidad de River requiere de una hazaña de sus futbolistas en 90 minutos decisivos después de tres temporadas en caída libre, con un antecedente inmediato de ocho partidos sin victorias y de un pobre rendimiento ofensivo con solamente 15 tantos marcados en las 19 jornadas del torneo Clausura 2011.
En este contexto, la necesidad de anotar dos goles reduce al mínimo la esperanza de sus hinchas, ya que en el actual semestre sólo alcanzó a marcarlos una vez ante el descendido Huracán y otra frente al Newell's Old Boys, penúltimo en la clasificación de esa competición.
La afición riverplatense se manifestó en los últimos días con hechos violentos, razón por la cual se dispuso un operativo de seguridad sin antecedentes en el fútbol de este país, con 2.300 policías dentro y en los alrededores del estadio 'Monumental'.
Tras la derrota del pasado miércoles en Córdoba ante el Belgrano (2-0), tanto los futbolistas como el entrenador Juan José López guardaron silencio a 35 kilómetros de Buenos Aires, lejos de las instalaciones del club, en las que habitualmente se concentran y de las que prefirieron alejarse por razones de seguridad.
En el Hindú Club de la localidad de Don Torcuato, el presidente del River, Daniel Passarella, se concentró con el equipo y observó junto con López los entrenamientos. Parte de la prensa deportiva asegura que en los últimos días el ex jugador y entrenador y ahora dirigente dispuso cambios de futbolistas y tácticas.
Las autoridades del club, las policiales y del gobierno temen reacciones violentas de parte del público en el marco de un resultado negativo que provoque el descenso del River a la segunda categoría.
En Córdoba, tras el segundo gol marcado por el Belgrano, varios hinchas riverplatenses saltaron desde los graderíos al campo de juego, interrumpieron el partido e increparon a los futbolistas, un hecho que ha puesto de manifiesto un estado de crispación de muy alto voltaje.
En ese encuentro, los defensas Paulo Ferrari y Adalberto Román y el
mediocampista y capitán Matías Almeyda quedaron inhabilitados para jugar en el 'Monumental' por acumulación de tarjetas, situación que terminó de complicar al técnico López.
Ricardo Zielinski, afirmó este viernes que sus jugadores "no miran" lo que pasa en River Plate, equipo que se jugará este domingo su permanencia en la Primera División del fútbol argentino tras haber perdido en Córdoba por 2-0 en el partido de ida de la Promoción.
"Tratamos de pensar solamente en el partido y no mirar lo que le pasa a River. Intentamos quedar ajenos a lo que le suceda al rival", dijo el técnico del Belgrano. Ricardo Zielinski horas antes de viajar a Buenos Aires con la plantilla.
"Buscaremos jugar de igual a igual. Como hicimos durante todo el torneo, planteando el mismo esquema que utilizamos en casa", añadió. "Yo no quiero que seamos un rival digno: a mí lo único que me importa es ganar. Y es lo que intento trasmitir. Debemos lograr nuestro objetivo" de ascender a la Primera División, aseguró.
El entrenador del equipo cordobés señaló que espera que el árbitro Sergio Pezotta -designado para dirigir en la Copa América- tenga "buena tarea", como la de su colega Néstor Pitana en Córdoba.
En tanto, Gimnasia y Esgrima La Plata, que deberá jugar la Promoción por tercer año consecutivo, se enfrentará fuera de casa este domingo, en el primer partido de esta fase extra, con San Martín de San Juan (oeste del país).
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