El ex capitán de Inglaterra, de 35 años, llegó el lunes a la sede de entrenamiento del Tottenham para pasar su examen médico y unirse a a la plantilla, con la que tratará de mantener su forma física hasta el próximo 10 de febrero.
"Es maravilloso tenerlo aquí. Trabajamos duro para traerlo esperando que pudiera venir y jugar", dijo Redknapp en declaraciones a la cadena británica Sky Sports News, en las que aseguró que trataron de "cerrar un acuerdo que le permitiera jugar" para ellos.
"Veremos cómo va", añadió el entrenador, cuya voluntad es que Beckham pueda, además de entrenar con los "Spurs", jugar junto a ellos en la Premier League, competición que el próximo sábado los enfrentará precisamente a su antiguo equipo: el Manchester United.
Los Ángeles Galaxy se niegan a conceder a su futbolista permiso para jugar con el Tottenham debido a su preocupación por el seguro y a las opciones de que éste sufra otra lesión, como la del año pasado durante su cesión al Milan.
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La estancia de David Beckham en White Hart Lane coincide con los meses de descanso de la Liga estadounidense, para cuya reanudación en marzo deberá estar de vuelta en América.