El incidente tuvo lugar en plena calle cuando el plantel dirigido por Gerardo Martino bajó del bus que lo traía de regreso del entrenamiento matutino y la prensa aguardaba detrás de una valla para hablar con los jugadores.
Messi fue uno de los últimos en descender del autobús y apenas dio unos pasos una fanática que quería un autógrafo para su hijo corrió hacia él, pero de inmediato la policía se lanzó sobre ella y se la llevó.
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El astro del Barcelona no jugó en el debut con victoria de Argentina ante Chile (2-1) el lunes en la Copa, aquejado por un fuerte dolor en la zona lumbar.
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Se espera que la 'Pulga' sea de la partida en el segundo encuentro albiceleste, el viernes contra Panamá en el Soldier Field de Chicago.