"Al final de la tarde, el club Corinthians y el atacante Adriano decidieron, de común acuerdo, terminar el contrato de trabajo entre las dos partes, que era válido hasta junio próximo", según un comunicado del club.
El atacante de 30 años había sido separado de la plantilla que el sábado empató 1-1 con el Guaraní de Campinas, por el torneo regional de Sao Paulo, y de la nómina que viajó a México para enfrentar el miércoles al Cruz Azul, por la Copa Libertadores.
El motivo de la separación, decisión que fue tomada por el técnico Adenor Bacchi 'Tite', fue la negativa del jugador a pesarse en la báscula, como el resto del plantel lo hace antes de cada entrenamiento.
Después, Adriano pidió que fuese dispensado de los entrenamientos del domingo con el equipo alterno, situación que deterioró más la relación con el técnico.
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Según el comunicado, "los representantes del jugador y el Departamento Jurídico del club negociarán los detalles de la rescisión y, de esta forma, Adriano no integra más el grupo profesional del Corinthians, y, por consiguiente, está dispensado de presentarse mañana con el resto del equipo".
Durante los once meses y medio en que Adriano defendió al Corinthians, el exmundialista marcó apenas dos goles en ocho partidos y pasó más en el quirófano, en sesiones de recuperación y en los titulares de prensa por hechos extradeportivos, como ausencia de los entrenamientos y líos policiales.
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El 24 de diciembre, en Río de Janeiro, una amiga de Adriano acusó al futbolista de dispararle accidentalmente dentro del automóvil del jugador, pero las autoridades determinaron la inocencia del atacante después de escuchar a los testigos y que la propia mujer se retractó después de la acusación.