El presidente del club, Roberto Fernández, declaró este lunes a radio Fides que para pagar las deudas, que sobre todo fueron contraídas por anteriores directivos, se venderán las acciones con el propósito de reunir 250.000 dólares.
Fernández reconoció que adeudan pagos a sus jugadores y agregó que hace todos esfuerzos que puede para cubrirlos hasta el próximo sábado, cuando debe comenzar el torneo Apertura en Bolivia.
El sindicato de jugadores del país, Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol), amenaza con no iniciar el campeonato si los clubes incumplen sus obligaciones pendientes con los jugadores.
Una muestra de la crisis del Blooming fue la salida de sus filas del guardameta de la selección boliviana Sergio Galarza, que fichó por el modesto Sport Boys, que debutará en el Apertura.
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El delantero franco-argentino Hugo Bargas también dejó el Blooming para sumarse a la plantilla del Oriente Petrolero.
Fernández dijo que tuvo prescindir de ambos jugadores pese a que eran claves en el Blooming porque pedían un incremento de salarios.
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Por contra, el equipo se reforzó con el atacante boliviano Pablo Salinas y su compatriota, el volante Edgar Escalante.
Blooming, dirigido por el argentino Víctor Hugo Andrada, recibirá en Santa Cruz el miércoles 31 de julio al River Plate uruguayo.