Después de aquel glorioso 1968 en el que Estudiantes arrebató el cetro mundial a todo un Manchester United liderado por Bobby Charlton y el malogrado George Best, a Estudiantes le vuelve a pasar un tren para lucirse en el contexto mundial del fútbol.
Entonces, ilustres como Carlos Bilardo o Juan Ramón Verón alzaron la Copa Intercontinental, y ahora es precisamente el hijo del segundo, Juan Sebastián, el que tendrá el estímulo de echarse al equipo a la espalda para emular a su padre y aquel Estudiantes glorioso que firmó tres Libertadores seguidas.
Esta será la cuarta participación de Estudiantes en el choque de clubes entre continentes, después de los descalabros contra el Milan y Feyenoord (1969 y 1970, respectivamente), y lo hará con la idea de llegar al sábado y medirse contra el Barcelona español, en el pulso que todos esperan, aunque tanto Pohang como el rival barcelonista, el Atlante mexicano, no parecen oponentes de poca monta.
La suerte del equipo argentino pasará en gran medida por su cerebro, el veterano centrocampista Verón, pero también en parte por el acierto de su atacante Mauro Boselli, máximo goleador de la Libertadores y con experiencia en Mundial de Clubes, aunque no llegó a jugar la final que Boca perdió en el 2007 ante el Milán por 4-2.
El Pohang Steelers es el campeón surcoreano y ganador del la Liga de Campeones de Asia, tras derrotar contra pronóstico al poderoso Al Ittihad saudí (2-1), lo que supuso el tercer cetro continental para el equipo de Corea del Sur.
Alineaciones probables:
Estudiantes: Damián Albil; Clemente Rodríguez, Leandro Desábato, Christian Cellay, Germán Ré; Enzo Pérez, Juan Sebastián Verón, Rodrigo Braña, Leandro Benítez; Mauro Boselli y Maxi Núñez.
Pohang Steelers: Shin Hwa Yong; Choi Hyo Jin, Kim Taesu, Kim Jae Sung, Denilson, Hwang Jae Won, Kim Jung Kyum, Kim Hyun Gil, Namkung Do, Shin Hyung Min, No Byung Jun.
Árbitro: Roberto Rosetti (ITA)