En la rueda de prensa previa al partido de que decidirá el segundo finalista de la competición europea, el centrocampista alemán ha reconocido que los azulgrana son capaces de dar la vuelta a un resultado tan adverso.
"Está claro que por el resultado de la ida hemos abierto la puerta, pero aún no hemos pasado por ella. Va a ser un partido difícil de resistir. Son pocos los equipos que han resistido en el Camp Nou. El Barça tiene el orgullo herido y eso les hace muy peligrosos", advirtió.
Y añadió: "Tenemos una buena oportunidad, estamos concentrados y ya veremos qué puede pasar. El Barça es capaz de hacer un partidazo y tenemos que estar atentos".
Schweinsteiger, que si ve una tarjeta amarilla en el Camp Nou se perdería la hipotética final de Wembley, ha señalado que este hecho no cambiará su manera de jugar.
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"Se aborda el partido con normalidad. De la misma manera de siempre, claro que no hay que hacer faltas, pero hay que disputar los duelos como dios manda porque no hay nada decidido. Preparamos el partido como siempre", explicó.
Asimismo, reconoció que jugar en el Camp Nou puede perjudicar su juego, ya que es un campo "más ancho" y el público pondrá mucha presión para que el Barça pase a la final.
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"Jugar en el Camp Nou le puede beneficiar al Barça. El campo es más grande y eso será raro para quien todavía no ha jugado aquí", -aseveró-. Los seguidores estarán apoyando al equipo para sacarnos de quicio, por eso deberemos estar muy concentrados".
Por último, el centrocampista ha señalado que el equipo no estará pendiente del partido de vuelta que esta noche disputarán el Real Madrid y el Borussia de Dortmund, porque "lo importante" es que su equipo pase a la final.
"Nosotros nos centramos en nuestro partido. Hemos venido a clasificarnos y no tenemos influencia sobre quien queremos que llegue a la final. Queremos estar en Londres", concluyó.