Tras cosechar su primera
derrota del curso el sábado ante su vecino el Manchester City 2-1, los
jugadores dirigidos por el portugués José Mourinho volvieron a caer, con un gol
de Tonny Vilhena a los 79 minutos.
No parece que esta derrota
pueda comprometer las opciones de los Reds Devils de superar la primera fase,
al formar parte de un grupo A en el que además se enfrentarán al Fenerbahce y
al Zorya Luhansk, de Ucrania.
Para decepción del numeroso
público local, Mourinho prescindió de los holandeses de su plantilla en el once
titular. Timothy Fosu-Mensah y Memphis Depay empezaron en el banquillo,
mientras que Daley Blind no entró en la convocatoria.
El preparador portugués
cambió ocho jugadores con respecto a la alineación que cayó ante el City.
Ofreció una oportunidad al argentino Marcos Rojo, a los españoles Ander Herrera
y Juan Mata y a los franceses Morgan Schneiderlin y Anthony Martial.
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Sólo el portero español
David De Gea, el defensa marfileño Eric Bailly y el centrocampista francés Paul
Pogba, desconocido durante todo el partido, conservaron su plaza en el equipo,
al contrario que las estrellas Zlatan Ibrahimovic (entró a la hora de juego) y
Wayne Rooney, además del belga Marouane Fellaini.
Este once experimental no
inquietó al Feyenoord. Entre las pocas ocasiones visitantes un disparo muy
claro para Martial que lanzó fuera de la portería a la media hora de juego.
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A diez minutos del final el
público estalló cuando De Vilhena concluyó una gran jugada colectiva.