A pesar de irse arriba en el marcador, el Once Caldas no supo cerrar el partido y la manija técnica del 'Teacher' Berrío le dio la vuelta al trabajo del suspendido Torrente, quien tuvo que ver a lo lejos cómo su equipo caía por primera vez en el semestre.
El Once no levanta y aún no sabe lo que es ganar tras cuatro fechas, mientras el Pasto entra en lo que parece el inicio de una buena racha, pues lleva dos victorias consecutivas en Liga y tres si contamos la Copa, en donde eliminó al Real Cartagena.
La dupla ofensiva con Yuber Asprilla y Efraín Viáfara, que remató el partido, parece ser la llave para abrir a los rivales y ahora el reto para los nariñenses está en demostrar para qué están en este semestre cuando visiten el próximo 5 de agosto a Nacional.