El incidente ocurrió el 22 de marzo, cuando el arquero serbio Vilson Cakovic agarró la bandera de un hincha que entró a la cancha antes de un penal.
El manager del club, Kamber Memallaj, dijo este miércoles que Cakovic y su compatriota y volante Djordje Djordjevic decidieron renunciar "por temor a que no haya un ambiente seguro en los próximos partidos".
La animosidad entre estos países balcánicos resucitó el año pasado, cuando un dron que cargaba una bandera nacionalista albanesa voló sobre un estadio en Belgrado donde Serbia y Albania jugaban un partido por las eliminatorias de la Eurocopa.